Publicado el 23 de oct, 2021

Discurso Presidente CDUC - José Manuel Vélez S-M

Este sábado 23 de octubre se transformará en una fecha muy importante para los casi 85 años de vida del Club Deportivo Universidad Católica. La historia marcará este día como uno de los hitos más relevantes en la vida de nuestra institución y será recordado como la jornada en que concretamos un anhelo muy esperado por toda la comunidad. Con legítimo orgullo podemos afirmar que el Nuevo Edificio de Deportes del CDUC es una feliz realidad y se convierte en un espacio de desarrollo para todas nuestras ramas deportivas.

Como todo proceso, la materialización de esta obra no estuvo exenta de dificultades y circunstancias que fueron marcando el día a día desde la instalación de la primera piedra hasta hoy, Imposible abstraernos de la pandemia y una emergencia sanitaria que nos sorprendió a todos, obligándonos a adecuar nuestras formas y procedimientos, poniendo por sobre cualquier interés lo sanitario, con el afán de sortear con éxito esta situación que aún permanece. Tan fuerte era nuestro compromiso que lo anterior no nos detuvo; muy por el contrario nos hizo trabajar con mayor ahínco para llegar a este significativo momento...

Imponernos un objetivo de esta magnitud fue desde el primer día un enorme desafío. La infraestructura es uno de los 6 pilares de nuestro Plan de Desarrollo Deportivo, y es por ello que soñamos este nuevo espacio para nuestro Club y el deporte chileno, como un lugar con los más altos estándares de equipamiento, para así también dar cabida a las funciones que nos imponen los otros 5 pilares del Plan señalado, y conseguir los objetivos deportivos que nos proponemos con nuestras ramas deportivas. Cada espacio, cada recinto dentro del Edificio de Deportes, fue pensado en pos de esos objetivos que nos trazamos diariamente para formar con solidez a deportistas que se entrenan para alcanzar la elite del deporte nacional.

El Club Deportivo Universidad Católica promueve la formación de deportistas íntegros, forjados en los más altos valores de nuestra misión, la sana competencia, el juego limpio, la disciplina, impulsados día a día por un selecto staff de entrenadores que coinciden en la importancia de asumir que ganar no es un objetivo que se alcanza a cualquier precio, y que formar es cumplir etapas que son propias del proceso que deben llevar, como consecuencia, a la alta competencia, con el lógico anhelo de representar exitosamente al CDUC y a Chile. Es precisamente esta misión basal lo que motivó al Club a levantar este edificio. La formación y la alta competencia requieren de este nivel de infraestructura para alcanzar la meta y lograr los objetivos de nuestras 12 ramas deportivas. 

También es cierto que nos debemos a una noble tradición y que tal como reza nuestro himno: llena de luz nos guía el Alma Mater inmortal. Por eso quiero agradecer el compromiso, reafirmado hoy por la Pontificia Universidad Católica de Chile a través de las palabras y el mensaje entregado hace algunos minutos por el rector Ignacio Sánchez. Es que no nos podemos desligar de un compromiso y una alianza que se estableció en un ya lejano abril de 1937, cuando la inquietud y visión de un grupo de estudiantes permitió que nuestro Club sea lo que es hoy día, un aporte en el desarrollo del deporte de nuestro club, de nuestra universidad, y de nuestro país. ¿Cómo no sentir sana satisfacción de reconocernos también hoy, y con este hito, en nuestra historia común?

Más de 15 mil metros cuadrados albergarán desde hoy el trabajo de cientos de personas. Desde lo administrativo hasta la alta competencia. Modernos recintos para la práctica del deporte, un gimnasio multiuso, una piscina olímpica, un laboratorio que aplicará la ciencia al deporte, una completa instalación médica al servicio de nuestros deportistas y un moderno centro de eventos, son parte de los espacios que hoy inauguramos gracias al compromiso de tantos que trabajaron en pos de este gran objetivo. Es justo reconocer en esta ceremonia el trabajo y la propuesta de arquitectura, sobria, elegante, y funcional de Teodoro Fernández Larrañaga, Premio Nacional de Arquitectura 2014, quien, junto a un destacado equipo, pensó y diseñó esta magnífica obra, junto a la colaboración permanente de Felix Villa y Solange Calderón por parte de nuestro club.  

Tal como dije antes, tantos han aportado a este proyecto... Es precisamente en ellos en quienes quiero detenerme, pero como suele ser en estas circunstancias y evitando la injusticia de dejar a personas muy relevantes fuera de los agradecimientos, quiero extender estas palabras de gratitud al directorio que me acompaña, a los presidentes y directores que antecedieron esta gestión, a nuestros gerentes, ejecutivos, trabajadores y colaboradores; a nuestras socios comerciales, a nuestros socios generales y socios deportistas, pero fundamentalmente a nuestros deportistas y entrenadores porque son precisamente ellos quienes marcan nuestro camino y nos imponen, con su preparación, entrega y éxitos, los desafíos venideros. Creo que la forma más simple de agradecer es haciéndolo de manera fraterna a todos quienes sienten y viven los colores de la UC. 

Es también un buen momento para agradecer a nuestros socios estratégicos, a nuestros sponsors, quienes a pesar de estos duros años que nos ha impuesto esta pandemia global que nos mantuvo encerrados por largos períodos de tiempo, limitándonos en el quehacer del Club, el haber postergado los grandes eventos deportivos del calendario nacional, siguieron creyendo en este Club, en sus profesionales, en sus deportistas, y en sus sueños de triunfos.

Se aproximan desafíos para el deporte chileno y nuestro Club está dispuesto al llamado y a responder con la responsabilidad que siempre lo ha hecho. Desde nuestra Fundación, hace más de ocho décadas, también hemos sido generosos en poner nuestra infraestructura y capacidad organizativa a disposición de mega eventos. Santiago 2023 está muy cerca y el Nuevo Edificio de Deportes del CDUC espera también ser parte de esa magna fiesta deportiva, poniendo a disposición del Comité Organizador Local de los próximos Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Santiago 2023 todas nuestras capacidades y estas modernas instalaciones que hoy se inauguran. 

Nuestro Club, al inaugurar este edificio no solo da un gran paso en mejorar su infraestructura, sino que estamos llamados a ser más creativos, más activos, a redoblar nuestros esfuerzos para mejorar la formación deportiva de nuestros niños y niñas, para aumentar la presencia del Club en la Alta competencia nacional e internacional, mejorar decididamente los resultados deportivos, incorporando el conocimiento y la ciencia, compartiendo las experiencias de los más de 1.800 deportistas activos del Club, de los cuerpos técnicos de las 12 ramas deportivas, de los socios generales y sus actividades dirigidas y recreativas. Los invito a todos a trabajar con toda la pasión y cariño por nuestra camiseta, a poner todo lo nuestro de manera responsable, para hacer de este Club, nuestro Club Deportivo Universidad Católica, el mejor Club.

Comencé estas palabras haciendo notar este momento como un hito histórico de nuestro Club – pero estamos llamados a establecer hitos – y uno de esos hitos quiero llamar la atención también hoy. El próximo 26 de octubre – en 3 días – se cumplen 50 años de la compra de este campo, que era parte de la Hacienda Apoquindo, por parte del rector de la universidad entonces, don Fernando Castillo Velasco, a don Luis Rosselot. El Club posteriormente llamó a este campo San Carlos de Apoquindo, en memoria de Monseñor Carlos Casanueva, rector de la Universidad Católica al momento de la fundación del Club y fue tan potente nuestra presencia que todo el barrio pasó a tener este nombre.

Considero que es preciso tener clara nuestra historia, transmitirla a las nuevas generaciones de dirigentes y deportistas, no con un afán nostálgico, sino simplemente de conocimiento y saber lo que podemos aprender de ella.

Por ello hago este reconocimiento a las personas que en el año 71 hicieron posible contar con este gran Campo Deportivo San Carlos de Apoquindo, al directorio de la época encabezado por mi padre, Manuel Vélez Samaniego, y también a Eduardo Cuevas, Alejandro Duque, y Harry Rahausen

Miro a las tribunas de este gimnasio polideportivo y veo a tantos amigos, a tantos que se merecen un abrazo de agradecimiento porque está linda noticia que hoy compartimos también les pertenece. Es lógico y válido sentir emoción y cómo no, si en estos muros hay un compromiso genuino con nuestros colores y el deporte. Somos una institución privada, una Fundación sin fines de lucro que reinvierte todo lo que genera en lo que nos mueve: el deporte. Todo nos cuesta un poco más y esa es una premisa que nos impulsa con mayor fuerza a ir tras los objetivos propuestos; sin embargo mirar la concreción de obras como la que hoy inauguramos nos proyecta también a un campo de excelencia deportiva en San Carlos de Apoquindo, cimentando el sueño de quienes se imaginaron así de grande a La Católica... Hoy estamos de fiesta, celebremos como los mejores Cruzados!! Felicidades y a disfrutar con orgullo este día histórico.

Muchas gracias!

Por La Patria, Dios y La Universidad.